15. TECNICAS DE EXTINCION EN ESPACIOS CONFINADOS

Curso online técnicas y métodos de extinción en espacios confinados
Tema del curso emergencias bomberos. Sumario: Localización del foco de incendio. Ventilación antes de la extinción. Técnicas de aplicación del agua. Técnica de ataque indirecto (defensivo). Técnica de enfriamiento de gases (ofensivo). Pulsaciones cortas. Pulsaciones largas. Pulsaciones largas con barrido. Método de ataque ofensivo. Control de temperatura. Ataque ofensivo a los gases/llamas. Pintar paredes. Técnica de ataque directo. Ataque exterior ofensivo. Protección de fachada. Ventilación tras la extinción.

Online course for firefighters in emergencies. Summary: Firefighting techniques in confined spaces. Focus location. Ventilation before extinction. Extinction: Water application techniques. Indirect attack technique (defensive). Gas cooling technique (offensive).



METODOS DE EXTINCION EN ESPACIOS CONFINADOS

Curso online de Operaciones en Emergencias para bomberos



1. LOCALIZACIÓN DEL FOCO



Dependiendo de la dificultad para localizarlo se utilizará equipos, materiales o técnicas diferentes.

Podemos encontrar desde focos visibles por ventanas a la llegada al lugar hasta focos latentes en falsos techos difíciles de localizar.

En caso de dificultad es útil utilizar cámaras de visión térmica para ayudarnos.

Es fundamental la localización del foco o focos (si hay más de uno) para poder diseñar cualquier otra operación prioritaria o incompatible (rescate, ventilación, etc.).

A veces es posible confinar el foco dentro de la habitación donde se encuentra cerrando la puerta:

  • Una vez cerrado sabemos que tenemos tiempo suficiente antes de que se propague a otras dependencias para realizar rastreo, localización de víctimas, rescate o ventilación del resto de la vivienda para facilitar las tareas anteriores.

  • Una vez concluidas podemos afrontar la extinción del incendio con más tranquilidad.



2. VENTILACIÓN ANTES DE LA EXTINCIÓN



Aparte de las ventajas que puede aportar la ventilación en la localización y rescate de víctimas como hemos señalado anteriormente, se pueden utilizar tácticas de ventilación defensiva para crear vías de evacuación seguras y limpias de humo (eliminar de humo del hueco de escalera), o para proteger estancias evitando que el fuego se propague hasta ellas.

Estas maniobras se explicarán con posterioridad en un apartado sobre ventilación táctica.



3. EXTINCIÓN: TÉCNICAS DE APLICACIÓN DEL AGUA



La extinción del incendio se realizará teniendo en cuenta todo lo descrito en los fenómenos que pueden provocar los gases de la combustión en los recintos confinados.

Debemos conocer e identificar bien la fase en la que se encuentra el incendio y así poder predecir cualquier situación de peligro potencial.

Consideraciones a tener en cuenta en la extinción:

      1. Atacar siempre que sea posible el incendio desde el interior del edificio y no por el exterior.
      2. No realizar nunca ataques enfrentados por dos equipos a la vez, el vapor generado por el agua de extinción de uno de ellos puede provocar quemaduras en los otros.
      3. Por la misma razón no se debe lanzar agua desde el exterior hacia dentro. Perjudicaríamos la situación de compañeros en el interior o de posibles víctimas.
      4. Aplicar agua en forma de pulsaciones para enfriar el colchón de gases.

  • Las pulsaciones son disparos de agua pulverizada a presión con ángulo de cono entre 35-40 grados y persiguiendo un tamaño de la gota no muy grande para favorecer su evaporación total y con ello su capacidad de enfriamiento, pero al mismo tiempo que no sean demasiado pequeñas porque les faltaría energía cinética para llegar al centro del colchón y se evaporarían antes de llegar. El tamaño ideal puede estar en torno a los 0’3 mm Ø.


TÉCNICA DE ATAQUE INDIRECTO (DEFENSIVO)

Este procedimiento persigue el enfriamiento de la capa de humo acumulada bajo el techo por debajo de su punto de inflamación, mediante la vaporización del agua al contacto con el techo caliente. El agua se dirige a los límites calientes del compartimiento (techos y paredes) con la finalidad de generar vapor.
técnicas de extinción de incendios, ataque indirecto defensivo
Procedimiento: Se utiliza agua pulverizada con el cono en posición de abertura media dirigida a la parte superior y circundante al foco/s del incendio. La lanza debe moverse en forma circular de forma que se asegure la máxima cobertura.

Efectos que se consiguen:
      1. Frente a los gases de la combustión, se consigue un doble efecto, por una parte enfriarlos y por otra diluirlos.
      2. Así mismo, también se enfría la estructura del compartimento.
      3. Las grandes cantidades de vapor producido ejercen un efecto de sofocación sobre el incendio.
      4. El plano neutro desciende, con la consecuente reducción de la visibilidad y el empeoramiento de las condiciones de seguridad para los bomberos y las víctimas.

Debido a las grandes cantidades de vapor de agua a alta temperatura que se generan, este método debe utilizarse solamente desde el exterior del recinto, cuando no existan víctimas en el interior.

Este método tiene los siguientes inconvenientes:

      1. Reduce la visión al destruir el plano neutro.
      2. Empeora las condiciones en el interior, por el aumento aparente de temperatura debido a la producción de vapor.
      3. Imposible de emplear si hubiera que hacer un rescate.
      4. Su empleo debe limitarse a su aplicación desde el exterior de la estancia.


TÉCNICA DE ENFRIAMIENTO DE GASES (OFENSIVO)

Este método de ataque utilizado para la extinción de fuegos confinados se basa en enfriar la capa alta de gases de combustión para disminuir su inflamabilidad y para provocar su contracción, antes de proceder al ataque directo final.

  • Con esta técnica se pretende "asegurar" la vía de penetración al incendio y reducir la probabilidad de que se produzcan episodios de flashover-backdraught y/o explosiones de gases de incendio.

Procedimiento: Consiste en colocar el agua pulverizada directamente en el volumen de los gases calientes o incendiados, utilizando proyecciones cortas y rápidas de forma que permitan regular la cantidad de agua necesaria a aplicar de la forma más controlada posible en el interior de la zona de sobrepresión.

La aplicación de esta técnica implica un control bastante riguroso de la cantidad de agua aplicada, ya que pequeños excesos pueden provocar grandes cantidades de vapor (mayor cuanto mayor sea la temperatura de las llamas o de los gases del incendio).

El efecto que se consigue de esta forma es el del enfriamiento de la masa gaseosa caliente y por consiguiente la disminución de su volumen por el efecto de contracción.


Formas de ejecutar la técnica de enfriamiento de gases

Existen tres formas de ejecutar esta técnica en función de la carga de fuego presente o de la forma de aplicación del agua:
      1. Pulsaciones cortas.
      2. Pulsaciones largas.
      3. Pulsaciones largas con barrido.

1. PULSACIONES CORTAS
      1. Se debe ajustar una posición del cono de la lanza donde obtengamos el ángulo suficiente para abarcar el mayor volumen posible de gases calientes/llamas.
      2. Efectuar pulsaciones cortas, dirigidas directamente sobre los gases del incendio en la zona de sobrepresión.
      3. El caudal habrá que ajustarlo de manera que sea el suficiente para conseguir el efecto deseado.
      4. En este caso suele ser suficiente la aplicación de alrededor de 150 lpm.
Métodos de extinción bomberos, pulsaciones cortas
Efecto que se consigue: Enfriar y diluir los gases inflamables y por consiguiente prevenir que los gases del incendio alcancen su temperatura de auto-ignición.

Este tipo de pulsaciones es práctico cuando la carga de fuego es pequeña y se quiere aprovechar al máximo el efecto de absorción de energía al evaporarse el agua. También permite un control mayor del agua aplicada.

La aplicación de pulsaciones cortas sobre un volumen relativamente grande de gases calientes o de llamas comporta un gran esfuerzo por parte del bombero, ya que se deben realizar con mucha rapidez y muy seguidas ya que en general el caudal de agua proyectado en cada una de ellas es pequeño. En estos casos resulta más aconsejable alargar la pulsación con el fin de introducir un flujo mayor de agua en el cojín de gases.


2. PULSACIONES LARGAS
      1. Con este tipo de pulsaciones se consigue introducir un volumen mayor de agua en el cojín de gases clientes o llamas.
      2. La posición a adoptar en el cono de la lanza será, al igual que en el caso anterior, el necesario para abarcar el mayor volumen posible de gases clientes.
      3. Los requerimientos de caudal en este caso pueden estar alrededor de los 230 - 360 lpm. En los casos en que esto no sea posible la duración de la pulsación deberá prolongarse.
      4. Tener en cuenta que estamos aumentando el tiempo de la pulsación y por tanto introduciendo más cantidad de agua. Aunque también se puede optar por ajustar un caudal mayor si fuese necesario.
Métodos de extinción de incendios, pulsaciones largas
En este caso podemos optar por reducir el ángulo del cono, con lo cual el alcance será mayor y por consiguiente mantener una mayor distancia a los gases inflamados, aunque la sección abarcada será menor.

Por el contrario, aumentar el tamaño del cono, con lo que conseguiremos abarcar un mayor volumen de gases calientes, implica que deberemos acortar la distancia al frente de llamas para poder llegar a él con el agua. En consecuencia la radiación recibida por el bombero, también aumentará.

Efectos que conseguimos: Enfriar y diluir las llamas y gases de combustión, permitiendo además a los bomberos penetrar en el interior del compartimento.


PULSACIONES LARGAS CON BARRIDO

En este caso, tratamos de conseguir un caudal de agua adecuado a la carga de fuego o de gases calientes presentes en el recinto donde estamos intentando penetrar:
      1. El ángulo del cono a utilizar nos debe permitir llegar sin problemas al cojín de gases o llamas.
      2. Intentaremos mantener el caudal en los 230 lpm – 360 lpm.
      3. Como en el caso anterior, se puede optar por prolongar la duración de la pulsación, o ajustar un caudal mayor.
      4. Se debe dirigir el chorro directamente sobre la zona de sobre-presión a los gases incendiados moviendo la lanza de forma que podamos “barrer” todo el volumen de gases calientes o llamas.

Efectos: Si se observa que efectuando este tipo de aplicaciones la intensidad del incendio disminuye, continuaremos así hasta ir alcanzando el control y en la medida que esto suceda seguir avanzado en busca del foco del incendio. Si a pesar de ello el incendio no remite, deberemos plantearnos la posibilidad de utilizar caudales de agua aún mayores o incluso retirarse a una zona segura ante la posibilidad de que se produzca una situación de backdraught o de explosión de gases de incendio.


MÉTODO DE ATAQUE OFENSIVO

Este método es el resultado final de la combinación de las técnicas de extinción antes descritas en un orden establecido.

El método consiste en un procedimiento basado en cinco acciones:
      1. Asegurar la entrada/salida al recinto.
      2. Control de temperatura.
      3. Ataque ofensivo a los gases del incendio/llamas.
      4. Pintar paredes.
      5. Ataque directo.

1. Asegurar la entrada/salida al recinto

Observar la cantidad de gases de incendio, el color, la densidad y la forma en que éstos se desarrollan en el exterior a través de las puertas y ventanas ya este es un indicador del estado de la temperatura y concentración de los gases en el interior.
Método de extinción ataque ofensivo
Previo a la apertura de la puerta, controlar la temperatura de la misma y situarse en una posición de seguridad. Para reducir la posibilidad de que el incendio evolucione hacia un episodio de backdraught al abrir la puerta, “asegurar” el acceso y salida del personal, mediante la proyección de agua pulverizada sobre la parte superior de la puerta y los gases que ya se encuentren en el exterior enfriándolos.


2. Control de temperatura

Restringir en la medida de lo posible la entrada de aire al recinto y proceder inmediatamente a proyectar agua en la zona de presión positiva para enfriar y diluir los gases del incendio: “control de temperatura”. Esto se consigue ajustando la apertura de la puerta de manera que quién quede en esa posición pueda abrir o restringir el paso de aire en función de las necesidades.
Método de extinción de incendios, controlar la temperatura
También con esta acción se consigue tener una idea de cuál es el volumen de gases calientes presente sobre la dotación de intervención:
      1. Se debe actuar sobre los gases que nos encontramos nada más entrar en el recinto, mediante pulsaciones cortas y rápidas tal y como se ha expuesto anteriormente.
      2. Si el agua proyectada se gasifica de forma rápida, significa que tenemos altas temperaturas de los gases de combustión. En este supuesto no se escuchará el sonido del agua al golpear contra el techo.
      3. En ese caso actuar rápidamente enfriando y diluyendo estos gases, utilizando el tipo de pulsación adecuada.

3. Ataque ofensivo a los gases del incendio/ llamas

En la medida en que se avanza, se deben efectuar pulsaciones de agua con el fin de enfriar y diluir los gases de combustión.

Cuando nos encontremos con el frente de llamas donde los gases de combustión se encuentran en su pleno desarrollo, actuaremos de forma “ofensiva” aumentando el efecto de las pulsaciones, prolongando si es preciso la duración de la pulsación y reduciendo el tiempo entre ellas.


4. Pintar paredes

Esta acción se aplica en la medida en que se avanza por el recinto incendiado, se debe combinar el ataque a los gases de combustión y la acción de aplicar agua sobre las superficies calientes, “pintar paredes”, que vamos dejando atrás.
Técnicas de extinción, pintar paredes
Se debe conseguir cortar el avance de propagación del incendio de tal forma que sólo quede activo el foco/s primario del incendio.

Al alcanzar el compartimento donde se desarrolla el incendio se procede a aplicar un caudal pequeño de agua sobre las superficies calientes (como si se estuviese pintando) de tal forma que el proceso de pirolisis se interrumpa definitivamente.

Procedimiento:
      1. Aplicar agua a chorro pleno, es decir, con el ángulo del cono al mínimo.
      2. Utilizar un caudal de agua pequeño, dependiendo de la penetración que se requiera para cada tipo de material involucrado.
      3. Dirigir el agua hacía las zonas altas de tal manera que esta se descuelgue hacía abajo.

Efectos: Evitamos la pirólisis de los materiales en combustión detrás del recorrido de acceso hacía el foco/s del incendio y en la misma habitación donde se ha producido el incendio. De esta forma reducimos la posibilidad de que una vez controlados los gases calientes o las llamas se produzcan acumulaciones de gases por pirólisis, que nos puedan generar una inflamación posterior.


5. Técnica de Ataque directo:

Se utiliza una vez detenido el proceso de pirolisis y por consiguiente de acumulación de gases.

Se aplica directamente sobre el lugar donde se encuentra el foco del incendio.

El agua se aplica en forma de chorro/niebla con ajuste del cono con un ángulo mínimo dirigido directamente al foco del incendio. Esta técnica puede utilizarse también proyectando el agua sobre las superficies que no están ardiendo, con ello se evita que éstas comiencen a arder o a pirolizar.

Se procede a finalizar la extinción al foco primario del incendio, para lo cual no es necesario actuar con un caudal excesivo, sino el mínimo necesario para conseguir enfriar y cortar de forma definitiva el proceso de incendio.
Técnicas de extinción, ataque directo
Mediante esta técnica conseguimos enfriar el material incendiado y disminuir e interrumpir la emisión de gases inflamables desde el material combustible. Es muy efectiva cuando el incendio afecta a pocos objetos y la accesibilidad al foco del incendio lo permite. Como contrapartida se pueden derivar posibles daños causados por el agua si ésta se aplica de forma indiscriminada. También puede aumentar la entrada de aire en el compartimento por efecto Venturi si no se toman las medidas adecuadas, lo cual puede provocar el incremento del incendio.

La aplicación de esta técnica da lugar a unas condiciones muy severas en el interior del recinto, tanto para los bomberos como para las posibles víctimas atrapadas en su interior, debido al vapor de agua que se genera.


ATAQUE EXTERIOR OFENSIVO

También conocido como ataque transicional o ablandado, no es en sí mismo un método de extinción. Se trata más bien de una técnica cuyo objetivo es, mediante la aplicación de un chorro compacto de agua, reducir la capacidad que el incendio tiene de generar calor, intentado no modificar el flujo de gases.

Por tratarse de una técnica aplicada desde el exterior, la seguridad para el interviniente es máxima. La correcta utilización de este método, mejora las condiciones en el interior del recinto afectado, de modo que facilita el posterior acceso para la correcta y definitiva extinción o en su caso para realizar salvamentos.

Procedimiento:
      1. Se trata de aplicar un chorro sólido y compacto por una apertura que dé acceso al área de mayor desarrollo del incendio, con un caudal entre 300 lpm y 450 lpm.
      2. Para alcanzar esos caudales, se utilizará una línea de 45 mm con lanza del mismo diámetro.
      3. Este chorro, se aplica a un punto fijo del techo durante un tiempo determinado (entre 5” y 30”). Debemos insistir en se trata de la aplicación de un chorro sólido.
      4. Si se aplica en cono, éste puede bloquear la salida de gases provocando que los gases del incendio se desplacen junto con el vapor generado por el interior del recinto buscando otra salida, pudiendo afectar a intervinientes, víctimas o incluso provocar incendios en zonas no afectadas.
      5. Tras la aplicación del chorro al techo, debe dejarse un tiempo para que se reestablezcan los flujos. La siguiente aplicación se hará, si es posible, en un punto distinto.

La aplicación correcta de la técnica supone una reducción de la potencia del incendio principalmente por tres motivos:
      1. Enfría los gases calientes.
      2. La parte del agua que se evapora diluye los gases.
      3. Enfría las superficies calientes o incendiadas alcanzadas por el agua deteniendo o ralentizando la pirolisis.

Esta técnica tiene como principales ventajas:
      1. Se puede aplicar desde el primer momento, sin necesidad de grandes recursos.
      2. Mejora las condiciones del interior, facilitando el acceso de los intervinientes.
      3. Mejora la probabilidad de supervivencia de las víctimas.
      4. Puede reducir el tiempo de control y extinción.

Entre los inconvenientes de esta técnica, debemos citar los siguientes:
      1. Una incorrecta aplicación puede bloquear la salida de los gases, modificando su flujo y pudiendo causar daños en zonas no deseadas o no afectadas.
      2. Posibles lesiones por quemaduras debido a una generación excesiva de vapor de agua.
      3. Posible empeoramiento de las condiciones de visibilidad por descenso del plano neutro.


4. PROTECCIÓN DE FACHADA



Con el fin de evitar la progresión vertical del incendio por fachada hacia plantas superiores se montará una instalación con el fin de aplicar agua a las llamas y gases que salen por algún hueco.

Es importante que el agua corte el avance vertical pero que en ningún caso entre dentro del recinto ya que el vapor que genera podría perjudicar tareas de rescate, incluso podría afectar a compañeros que trabajan en la extinción desde el interior.

La protección de fachada se puede aplicar desde el suelo, desde la cesta de un vehículo de altura, desde la ventana o balcón de alguna planta del edificio, etc.


5. VENTILACIÓN TRAS LA EXTINCIÓN



Con esta maniobra se pretende eliminar el humo que ha quedado tras la extinción.

A veces el humo no solo afecta a la vivienda del incendio sino que se ha extendido por otras partes del edificio. Es importante la ventilación completa de todas las zonas afectadas antes del realojo de los vecinos.


6. SANEAMIENTO DE ELEMENTOS INESTABLES



Por la acción del fuego y el calor pueden quedar elementos inestables con probabilidad de caer a la vía pública (persianas, cristales, toldos, aparatos de aire acondicionado, elementos constructivos, etc.).


7. RECOGIDA DE MATERIAL



Finalizados todos los trabajos se realizará un recuento y recogida de material.

Es importante la recogida de mangueras por la escalera antes del realojo del edificio para evitar accidentes innecesarios.